Durante las últimas semanas, me he preguntado: ¿Por qué somos nosotros quienes nos ponemos los propios palos en la rueda cuando se trata de avanzar hacia donde queremos llegar?
Cabe destacar, que muchas cosas nos frenan, hasta nos paralizan; patrones, mandatos, creencias, prejuicios, linaje ancestral, modelos adquiridos.
Sin embargo, cuando las condiciones están dadas, o bien, tenemos un deseo genuino de hacer, apare la más grande de las mentiras: "Mejor, en otro momento".
"En otro momento: (complete aquí con su mentira más recurrente)
Algunos ejemplos:
- Buscaré un trabajo mejor." - Dejaré esta relación." - Encontraré un mejor lugar (casa/ciudad/país)." - Hablaré con X para decirle lo mal que me siento." - Me ordenaré con el dinero." - Estaré en paz conmigo mismx."
- Me haré una Consulta de Registros Akáshicos." Tras este listado de mentiras, aparece una aún mayor y más frecuente que es la de: "No tengo dinero" "No lo puedo pagar" o más solapada aún: "No tengo tiempo". Si reflexionásemos un poco más, siento que podemos empezar a considerar: ¿En qué cosas desperdiciamos nuestro dinero, nuestro tiempo, nuestra Energía? Quizás pensando, quizás no resolviendo, quizás mintiéndonos a nosotrxs mismxs. Tal vez, es más simple de lo que pensamos. Si fuésemos sincerxs con nosotrxs mismxs nos diríamos: "No quiero hacer eso ahora". Porque si realmente quisiera: ¿Tanto me resistiría a hacerlo? ¿Tanto me frenaría y/o negaría? Observándonos en nuestros comportamientos, es que comenzamos a sanar, a dimensionar lo que nos pasa y a reflexionar sobre lo que sucede, y más aún sobre lo que decidimos para nuestro bienestar, o la resistencia al mismo. Si realmente quiero un cambio, ¿Espero a que los demás/el afuera/el entorno/Dios/"ALGUIEN" cambie? Si el cambio es personal, es un deseo que nació en mí... ¿Qué me frena a re-ordenar, reacomodar y avanzar? ¿Qué me impide cambiar en mi interior? ¿Qué excusas me frenan a mi propio compromiso personal? ¿Qué tan reticente y caprichoso está mi ego que siempre me hace creer que el futuro va a cambiar "por arte de magia"? Sin ningún grado de responsabilidad sobre las decisiones que tomo, las palabras que digo, las acciones que pongo en marcha. ¿Qué niveles de victimización estoy solapando, sosteniendo y ocultando?
Y la tan temida pregunta: ¿Cuál es mi grado de responsabilidad en lo que manifiesto? ¿Cuál es mi parte en todo esto? Volviendo a la pregunta inicial, la que me incentivó a escribir esta reflexión tan particular: ¿Realmente existe el momento perfecto? o ¿Existe existe mi convicción de crear un momento que me incite a ir un poco más allá de mis limitaciones autoimpuestas? El momento ideal, el momento justo, el momento "perfecto", se crea (verb: crear), con la coherencia del pensamiento - sentimiento - acción. Sólo así lograremos salir de la nuestra propia maraña de pensamientos dificultosos que día a día acrecentamos y es tanta la repetición de los mismos, que terminamos creyéndonos todo el cuento. Otra realidad es posible. Salir de la matrix mental, también. Esperar a que el futuro sea feliz solo "porque me lo merezco" "porque soy buena persona", es eximirnos de nuestra responsabilidad creadora.
Asume tu rol de responsabilidad humana. Cocrea acciones de bondad y momentos de felicidad, para tu Mayor Bien y el de Todos. Suelta el control. Libera esa cantidad inexistente de pensamientos confusos, que no es LA VERDAD. Vuelve a tu Centro. Camina hacia El Hogar. Y proponte aprender a caminar, tomando con Humildad cada proceso, cada pasaje del sendero. Deja que sea Su Voluntad, y entiende que tu poder creador es más grande lo que imaginas. No pierdas tu foco, en tanto y en cuanto, también sea Su Voluntad. La magia existe cuando aprendes a ser humano.
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